¿Por qué funciona el uso de miel de Manuka para el eczema?

miel de manuka para el eczema

Si investigas un poco en internet, encontrarás muchos usos para la miel de Manuka (¡además de su uso en la alimentación!) y te preguntarás cómo una sustancia puede ser tan versátil. Desde el cuidado de heridas hasta el tratamiento del cáncer, la comunidad científica está tomando en serio sus posibles beneficios y se están realizando numerosas investigaciones. El valor de la miel de Manuka en el tratamiento del eccema es continuo, y se está desarrollando en productos específicos para el cuidado de la piel con eccema, ¡y hay mucha evidencia que demuestra que puede ayudar! Sigue leyendo para descubrir por qué la miel de Manuka es imprescindible para el eccema.

Miel y salud

La miel es conocida desde hace mucho tiempo por sus beneficios para la salud, ya que los antiguos griegos y romanos ya explotaban sus propiedades curativas hace miles de años. Se sabe que posee propiedades antibacterianas que ayudan en el tratamiento de heridas, por lo que fue un método de tratamiento popular durante la Primera Guerra Mundial y ahora se usa comúnmente en las unidades de quemados de los hospitales.

Más recientemente, sin embargo, el uso de la miel en medicina se ha expandido desde la industria ya establecida de los apósitos para heridas y se considera que es útil para prevenir el reflujo ácido, la gastroenteritis en bebés, tratar alergias, enfermedades de las encías e infecciones, así como aliviar los resfriados.

Lo que se sabe, en particular, sobre la miel de manuka es que los mecanismos de su actividad antimicrobiana difieren de los de los antibióticos. Esta actividad antibacteriana parece deberse a diversos factores, como su acidez y su contenido de azúcar, que son lo suficientemente bajos y altos, respectivamente, como para inhibir el crecimiento de la mayoría de los microorganismos; su componente de peróxido de hidrógeno, que a su vez inhibe el crecimiento de microorganismos; y componentes de origen vegetal que pueden ser exclusivos de diferentes tipos de miel.

Se cree que la aplicación de miel de Manuka en la piel ayuda a eliminar bacterias dañinas, reduciendo o eliminando la incidencia de brotes de eccema, y ​​desde entonces se ha convertido en un producto básico para el alivio del eccema. Al tratar la zona afectada, se cree que ayuda a mantenerla hidratada, reduciendo así los brotes y facilitando la recuperación de la piel seca y escamosa. Además, se cree que la alta viscosidad de la miel forma una barrera para la piel y previene infecciones.

La miel de Manuka tiene propiedades antibacterianas superiores a otros tipos de miel, y es el tipo de miel más utilizado en el tratamiento de una amplia gama de enfermedades y dolencias, incluidos el eczema y la psoriasis.

¿Qué es la miel de Manuka y por qué es tan especial?

Ahora ya conoces la historia y la ciencia detrás de la miel de manuka, pero ¿qué la diferencia de cualquier botella de miel con forma de oso del supermercado? La miel de manuka es producida por abejas que recolectan polen del arbusto de manuka, originario únicamente de Nueva Zelanda y algunas zonas de Australia.

La miel de Manuka es particularmente potente debido a su alto contenido de un compuesto llamado dihidroxiacetona, presente en el néctar de las flores de Manuka. Este compuesto produce metilglioxal, un compuesto con propiedades antibacterianas y destructoras de células.

Las investigaciones han demostrado que la miel de Manuka posee un amplio espectro de actividad antimicrobiana y que puede actuar sobre más de 80 especies de patógenos (un patógeno es una bacteria, un virus u otro microorganismo que puede causar enfermedades). Incluso se ha demostrado que la miel puede inhibir patógenos que normalmente causan infecciones en heridas, incluyendo cepas resistentes a los antibióticos convencionales. Además, algunos ensayos preliminares sugieren que la miel de Manuka podría ser útil para reducir la inflamación de la piel, lo que a su vez puede promover la cicatrización.

Uso de miel de Manuka para tratar el eczema

Si bien consumir miel de manuka es ideal para la salud interna, usarla para la piel tiene el mismo efecto en el exterior del cuerpo. Aplicar miel de manuka a la piel con eczema puede ayudar:

  • Mantener la piel húmeda, lo que ayuda a reducir o eliminar la incidencia de brotes de eczema.
  • Reducir la inflamación, lo que a su vez puede ayudar a la curación.
  • Inhibe el crecimiento de bacterias dañinas, incluido el estafilococo, que se encuentra comúnmente en la piel propensa al eccema.

También se cree que el consumo de miel de Manuka fortalece el sistema inmunitario; es lógico fomentar un sistema inmunitario sano para reducir el impacto del eczema. Al incorporar miel de Manuka tanto a tu dieta como a tu rutina de cuidado de la piel, ¡verás una mejora significativa en tu condición! Para encontrar los mejores productos de miel de Manuka para el cuidado de la piel, visita Wild Naturals y descubre los mejores y más potentes resultados.